Ciclo de vida

En la naturaleza, el cambio de estaciones determina el crecimiento de la planta de cannabis. A medida que los días se acortan, la planta pasará de la etapa de crecimiento a la de floración. Se acerca el otoño, es tiempo de cosecha para muchos otros cultivos. Esto sin embargo puede ser emulado artificialmente en un cultivo indoor. La excepción a esta regla son las semillas de cannabis autoflorecientes. Están programadas genéticamente para entrar en la fase de floración por sí mismas, independientemente de las condiciones estacionales.

Cuando la semilla se abre y expone su primera raíz blanca, es hora de colocarla en una maceta pequeña en el sustrato (tierra, fibra de coco, etc.). Esta raíz comienza a crecer y eventualmente la planta produce sus dos primeras hojas ovales.
La planta recién nacida permanecerá en la etapa de Plántula hasta que crezcan sus hojas verdaderas. Ahora necesitan tanta luz como sea posible para recibirla a través de sus hojas embrionarias, concentrará su energía en producir un follaje más abundante. Comenzará a producir hojas de 3 dedos, lo que hará que se parezca más a una planta de cannabis. A medida que la plántula continúa creciendo, más y más de estas hojas comenzarán a formarse.
De todas las etapas del cultivo de cannabis, la vegetativa es la más relacionada con el crecimiento. Las plantas más grandes necesitan más tierra para proporcionar suficiente espacio para sus sistemas de raíces. Por lo tanto, al comienzo del período de crecimiento, es recomendable trasplantar la planta a una maceta más grande. Tus plantas aún necesitan 18 horas de luz al día. También sentirá sed a medida que madure su sistema de raíces. Continúa regando mucho, pero no exageres. Controla la humedad del suelo para prevenir hongos y pudrición de raíces. Asegurate de que tenga suficiente agua y nutrientes, pero no demasiados, y disfruta viendo crecer tu cannabis.

Esta es la etapa que estabas esperando y es el último gran paso del ciclo de vida del cannabis. Para entrar en la etapa de floración en cultivos de interior, el fotoperiodo debe cambiar a 12 horas de luz / 12 horas de oscuridad sin interrupciones. En este momento, las plantas femeninas comienzan a desarrollar sus cálices o brotes. Los cogollos empiezan a hincharse y el aroma inconfundible de cannabis dulce llenará la carpa de cultivo. Los pistilos cambiarán lentamente su color del blanco a marrón claro o rojo, según la cepa, lo que indica que es casi el momento de la cosecha.

Llegado el momento podes cosechar las plantas cortándolas una por una. Usa tijeras afiladas y esterilizadas para prevenir infección a los cogollos. No te olvides de los guantes, debido a la cantidad de resina que producen.

Los cogollos se secan y luego se almacenan en un frasco. Si controlas la humedad, te van a durar mucho tiempo. El curado es el último pero más importante paso si queres obtener cogollos de la mejor calidad. Si ignoras este proceso, todo el esfuerzo realizado no será recompensado con una buena cosecha. Finalmente, cura tus cogollos durante al menos 6 semanas, a pesar de la tentación de quemarlos de inmediato. ¡Esto reducirá la aspereza de la flor y tus pulmones seguramente te lo agradecerán!