Cannabis en la antigüedad

Los descubrimientos más antiguos proceden de China, donde se han encontrado, entre otras cosas, restos de tela de cáñamo y cerámica decorada con cuerda de cáñamo. La datación radiométrica ha determinado que estas reliquias culturales tienen unos 6.000 años de antigüedad y que pertenecen a la cultura de Yangshao. La antigua medicina china también hace referencia al cannabis, mientras que otros textos describen cómo la planta «libera el pecado» y «proporciona el placer».
Cannabis Sativa

La marihuana y el cáñamo son la misma planta, la “cannabis sativa”, existiendo múltiples variedades.
La diferencia estriba en la cantidad de resina y su contenido de THC, tamaño y número de cogollos, forma de las hojas, altura de la planta, aroma, origen, etc.
El THC ( tetrahidrocannabinol ) es una sustancia psicotrópica que se halla presente en la resina. Cuanto mayor sea el porcentaje de dicha sustancia presente en la marihuana, de mejor calidad será esta.
La resina además del THC también contiene otras sustancias muy similares al THC, pero no psicoactivas que son el Cannabidiol ( CBD ) y el Cannabinol ( CBN ). Estas sustancias parecen ser las que determinan el olor y el sabor de la resina. El cáñamo común contiene gran cantidad de estas substancias en sus flores, pero un bajo contenido de THC, a veces inapreciable.
La sativa común presenta más contenido de THC cuanto más tropical sea su cultivo, o dicho de otro modo tiende a cañamizarse cuanto más se aleje del trópico, siempre en condiciones naturales.
En África se encuentran sativas de gran potencia, así como en el Caribe y América latina. La variedad Indica de la cannabis sativa crece en Asia, son plantas más bajas muy ramificadas con grandes cogollos muy resinosos.
Las sativas comunes tropicales crecen más espigadas y con cogollos de menor tamaño, su subida es más cerebral y más rápida.
La variedad Ruderalis crece en el norte de Europa y presenta cantidades variables de THC al igual que algunos cáñamos. Al plantar una semilla tropical en nuestro clima, si las condiciones le son favorables, puede mantener el vigor, pero a lo largo de generaciones tendería a cañamizarse.
Cannabis Indica

El cannabis índica es una variedad de cáñamo que suele ser originaria de zonas como Afganistán, Pakistán, el norte de la India, el Hindu Kush y partes de Europa del Este. Sin embargo, la región himalaya del Karakorum es el hogar original de la genética índica más pura.
Con la introducción de las primeras cepas de cannabis índicas, importantes en Occidente en los años 60, los cultivadores tuvieron la oportunidad de explotar las nuevas características genéticas para hacer que las plantas de cannabis sativa fueran más adecuadas para el cultivo de interior: así nacieron los primeros híbridos índica – sativa, con el objetivo principal de reducir el tamaño de las plantas, así como el momento de la floración, proverbialmente más largo.
Todas estas características contribuyen a hacer de las variedades de cannabis indica una solución especialmente versátil, adecuada tanto para el cultivo en interior como en exterior: cuando se cultiva en interior, tiene la ventaja de producir plantas bajas y bastante compactas que no son especialmente ramificadas: su crecimiento es, de hecho, bastante reducido y cada planta tiene un pequeño número de ramas laterales bastante fuertes, formadas por un tallo principal del que depende casi el 100% del rendimiento en términos de inflorescencias posteriores.